Fotomontajes de Luis Beltran

Los fotomontajes han poblado la tierra desde hace siglos, más exactamente desde 1857, cuando Henry Peach Robinson comienza sus pruebas en su recientemente instaurado taller de fotografía.  A partir de allí, la idea de generar momentos imaginarios, inmortalizados por ese instante de unión con la realidad que brindaba la fotografía en sus inicios.

A medida que pasó el tiempo y con las herramientas que se fueron creando, ese deseo por lo real que la fotografía plasma en sus inicios, pasa a un segundo plano, en especial con el advenimiento de la imagen sintética y todas las posibilidades de manipulación que ofrece. A partir de ahora no es necesario contar con una realidad que la cámara capte como un testigo silencioso, podemos construir mundos irreales sin límites más que nuestra propia imaginación y obviamente el talento.

Un campo de trigo visto de frente, con una escalera en el centro cuyos barrotes terminan en manos apuntando al cielo. Luz enrarecida.

Todo esto, me fue disparado cuando pude acceder a la galería del brillante Luis Beltran. Un artista nacido en Valencia en el año 1973 y que ha realizado múltiples muestras en todo el mundo y próximamente presentará su obra en New York y Gijón. Pero lo que habla más de él es la calidad de sus fotomontajes, el detalle, la elección de los colores (o la ausencia de ellos), mundos surrealistas, desafían nuestra mente al extremo.

Cuarto a oscuras, bajo el agua, con una gran puerta de vidrios repartidos abierta y un pez mirando hacia la cámara.

Pero no hablo más, porque jamás le haría justicia a tamaño trabajo. Les dejo los enlaces a dos de sus colecciones: Apología del presenteSueña conmigo, profundas y perfectas.

Categorizado en: